CULTURA LECTOR
En una de mis actividades de trabajo de atención al usuario como Bibliotecólogo quedé impresionado cuando, al decirle a una Sra. bien parecida y refinada que firmara nuestro formato de visita, ella de forma natural colocó una X y me pidió la almohadilla para colocar su huella desde ese momento y sin animo de juzgarla supe que la señora en cuestión era analfabeta.
No podía creer que en pleno siglo XXI hubiesen personas que no supieran leer ni escribir. Esta situación llevó a hacerme preguntas en cuanto a: ¿cómo sería la vida de una persona analfabeta?, ¿cómo podían guiarse para ubicar direcciones? y ¿cómo hacían para ayudar a sus hijos en la escuela?
Un amigo gran amigo licenciado en Educación me dijo: “Oswaldo Tu eres Daltónico, tienes una gran dificultad para dstinguir
los colores ¿cómo andas por la vida así?, ¿cómo te combinas la ropa?, ¿cómo
haces con los colores del semáforo?” le respondí que por simple intuición y
lógica. Sin darme cuenta esa también era la
respuesta a mi pregunta inicial y las razones, son hoy en día productos
de estudios sociales.
¿Somos
en Venezuela un pueblo lector? ¿Qué tanto entendemos lo que leemos?
Si
vamos a la raíz del problema, para que exista una comunidad de lectores debemos
disminuir los indicadores de analfabetismo y analfabetas funcionales. El interés
por fomentar y garantizar el acceso a las diversas fuentes a lecturas ha sido
un largo esfuerzo de instituciones tanto públicas como privadas.
Desde
1958 en el auge de la democracia se ejecutó el “Plan de Alfabetización y
Cultura Popular”, en 1982 se realiza la “Primera Jornada Nacional de Lectura.
En 1986 se crea una “Política Nacional de Lectura” a través del Ministerio de Educación y 3 años más tarde crean la “ Comisión Nacional de Lectura” que buscaba capacitar a los docentes para promocionar la lectura junto al programa Plan Lector de Caja Viajera con el famoso programa ACUDE.
Para los años 90, La Comisión junto a un grupo de fundaciones pasa a ser por decreto presidencial: “Fundación Nacional Para la Lectura” y se circulan de forma gratuita ejemplares de Libros con el fin de dotar las unidades de información y para la formación docentes.
En el año 2003 el Gobierno Nacional bautiza “Todo por la Lectura” a través del Centro Nacional de Libro realizando unas líneas de acciones y estrategias junto al Banco Mundial; Biblioteca Nacional, Ipasme, Fondos Editoriales gubernamentales y privados, Convenio Cuba–Venezuela, la creación de diferentes Misiones Educativas, Ferias del Libro, Biblioteca del Sur y dotación de Unidades de Información.
Para el 28 de octubre 2005 se declara El Día Nacional de Alfabetización y es reconocida por la Unesco con el 0,1% de analfabetismo superando las metas exigidas, la cual es de 4% para la declaración de un territorio libre de analfabetismo.
Todo
con el fin de intentar motivar a la población a esta práctica e impulsar la creatividad
de los docentes y profesionales en el manejo de la información.
Las nuevas tecnología de la Información
Las nuevas tecnología de la Información
Con
el uso de la tecnología de la información, los soportes de los documentos se han
diversificado y la lectura en papel, aunque para algunos sigue siendo sublime y hasta poético,
ha trascendido.
El formato electrónico y el uso de herramientas que nos lleva de forma rápida a la información que queremos, está dejando de ser opcional para ser obligatorio entre los usuarios; de allí el auge de revista y diarios en lineas, bibliotecas virtuales, o libros con contenidos multimedia.
El formato electrónico y el uso de herramientas que nos lleva de forma rápida a la información que queremos, está dejando de ser opcional para ser obligatorio entre los usuarios; de allí el auge de revista y diarios en lineas, bibliotecas virtuales, o libros con contenidos multimedia.
Si
bien es cierto que las redes sociales nos han permitido expresarnos y romper
ese anonimato que tenemos como usuarios, no podemos contar con que esa información
resumida y rápida sea siempre oportuna y veraz. No deberíamos hacer de este medio
nuestra única fuente de información, ya que carece generalmente de sustentos, control
y responsabilidad de lo que se publica como autor.
Algunos
colegas coinciden en
que los usuarios a nivel de educación media y básica les cuesta interpretar lo que leen y copian contenidos de forma textual sin hacer práctica de su capacidad de análisis, sin embargo poseen buenas habilidades para la búsqueda de información en linea.
Ya en el ámbito universitario se estimula un interés consiente por la investigación, lo que obliga tanto a docentes y especialista en el manejo de información a mantener colecciones actualizadas y unidades de información con soporte tecnológico que permita el intercambio de información.
Ya en el ámbito universitario se estimula un interés consiente por la investigación, lo que obliga tanto a docentes y especialista en el manejo de información a mantener colecciones actualizadas y unidades de información con soporte tecnológico que permita el intercambio de información.
Como bibliotecólogo, docente
universitario y escritor de este blog, pienso que se debe estimular no solo el interés por investigar contenidos, sino certificar la veracidad del mismo y su fuente. Romper ese esquema de crear "Individuos Cultos" y formar "Individuos Críticos de la Cultura y el Conocimiento".
Se debe entender que el témino de “Cultura Lector” debe democratizarse en nuestras sociedades y no para una élite de Bibliófilo que tienen como oficio ser etiquetados de intelectuales, haciendo del conocimiento un negocio de poder y estatus que los convierte en seres egoísta para compartir conocimientos.
Debemos despertar conciencia y romper mitos tales como: “Si
leo me da sueño”, “leer es aburrido” o "No tengo tiempo de leer". Pienso que la persona que dicen esto no han
encontrado el tema de su interés, que lo envuelva en el placer de adquirir
conocimiento a través de la lectura en el formato más amigable para sus
necesidades
Los invito a que sigamos leyendo y formando lectores desde nuestros hogares con los más pequeño, descubra cuales son sus intereses a través de los libros. Que no se pierda el placer de ganar cultura, estimular los sentidos, desarrollar la imaginación, crea hábitos de reflexión, concentración y compartir un legado necesario para la toma decisiones en la vida.
Imagen: Portada del Programa de la Asociación Cultural para el Desarrollo con sus siglas ACUDE, sistema de Alfabetización de los años 80 que consistía en la enseñanza a través de libro y disco de acetato llamados SONO ESTUDIO.